Parece que EL PAÍS se ha decidido a prestarle la atención que se merece el deporte del golf. Hoy la web publica un artículo del Juan Morenilla, que se encuentra en Augusta para envidia de quien esto escribe, con algunas claves y una fotogalería con algunos de los mitos del torneo, incluido ese Gary Player que, a sus 73 años, va a completar su participación número 52.
Se ha hablado mucho de algunos jóvenes con mucha proyección y aún mejor prensa. Sobre todo de dos: el español Álvaro Quirós y el norirlandés Rory McIlroy. Me declaro fan absoluto de los dos, de su determinación, de su forma de jugar y de sus trayectorias, pero una cosa es ser un gran jugador y otra ganar en Augusta a la primera. Eso es imposible, porque este campo se domina con los años. Un buen ejemplo de eso es Trevor Immelman.
El sudafricano, campeón el año pasado, ha estado arriba en varias ediciones antes de alzarse con el triunfo. Por cierto, entre susacertados comentarios en Golf +, Álvaro Beamonte ya dijo hace años que Immelman era un jugador con muchas posibilidades de llevarse el torneo. Eso es tener capacidad de análisis.
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