Primera buena noticia desde que el 27 de noviembre Tiger Woods estrellase su coche contra un árbol y despertase una de los mayores escándalos de la historia reciente. El número uno del mundo, más bien sus abogados, han conseguido una orden judicial para que no se puedan publicar en Reino Unido fotos suyas desnudo o practicando sexo.
Eso, sin embargo, no quiere decir que las haya, según el bufete especializado en la protección de la imagen de celebridades que ha contratado para la ocasión.
En cualquier caso, se trata de una gran noticia para alguien que ha apostado de manera tan fuerte por hacer del silencio, la discreción y el evitar el juego sucio con los tabloides su leit- motiv.
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