Stricker está en un gran momento de forma: no cae del top ten desde septiembre y ha ganado cuatro torneos, todos ellos importantes, en las últimas semanas. Este gran juego le ha llevado al segundo puesto del ranking mundial (7,71puntos), sólo por detrás de Tiger Woods (13,10) y ya por encima de Mickelson, que estuvo muy lejos de ganar su tercer Northern Trust consecutivo y que se queda en 7.63 puntos.
Todo esto le ha llevado a convertirse en el tema de discusión en el Confidencial de golf.com. La pregunta que se hacen los expertos es ¿Un hipotético número uno de Stricker es bueno para el golf? Alan Shipnuck dispara primero:
"No hay duda de que Stricker es un gran tipo, querido en el vestuario, por la prensa y entre los caddies. Pero si se convierte en el número uno, el golf está en problemas".
No piensan todos así, claro. Varios de los expertos recuerdan que es uno de los mejores, si no el mejor del mundo, con el putt y su humildad y sencillez dentro y fuera del campo. Desde luego, el golf necesita nuevos valores.
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